Si hiciéramos una encuesta a las personas que llevan las tareas del hogar sobre cuál es la que llevan con más dificultad, estamos seguro que coincidiríamos en la respuesta: planchar.

La tarea no se te hará tan pesada si eliges bien tu plancha. La principal diferencia es la disponibilidad de vapor, por lo demás, la calidad de planchado es prácticamente igual de buena entre una u otra.

La plancha de vapor, es para ti si planchas a diario, no dispones de espacio fijo y tienes que guardarlo cada vez en el armario, buscas rapidez y que sea fácil de manejar.

Aunque, queremos darte un consejo: nunca está de más (si tienes un centro de planchado), tener también una de vapor para cuando tienes que planchar una arruga molesta o por qué no, de repuesto mientras te la arreglan...

¿Como funciona? la plancha de vapor tiene un pequeño depósito de agua que se calienta y genera vapor.

Pasa, y atrapa ahora la plancha ideal para acabar cuanto antes la faena